Y vino. En Larrabetxu le recogimos tras comenzar las ruta de hoy en Etxebarri, Gaizka, Igor y Yo, Alfredo. Pasamos por Aperri creyendo que alguien nos esperaría en esa localidad de valientes. Si, si, valientes!!! nenazas, porque no salió ni uno.
Hacía fresco pero no tanto como para intimidar. Tras recoger a mi colega, Txemi, iniciamos la subida a Morga a buen ritmo. Se caracterizo por presentaciones varias, Txemi maricona 1, maricona 2, txemi, mucho gusto besitos y esas cosas. Así llegamos a Elejalde, donde el calor se empezaba a notar y desde allí descendimos a Ergoien. Buen ritmo y risas armonizaban nuestras pedaladas. Una hora hacía desde que nos habíamos subido a la bici y seguíamos con humor. Desde Ergoien nos dirigimos a un terreno inexplorado Arrieta, allí comenzamos a hablar de las viejas glorias y lo buenas que estaban en su momento, aunque más de uno, en esta ocasión 3 cabrones, quisieron entender que Carmen Sevilla está en la actualidad muy buena. Pues que sepan esos ignorantes, y así lo quiero decir en estas líneas, que esa CHAVALA en su momento estuvo muy buena, aunque ahora haya perdido todo su encanto. He de decir que dicho vacile me acompaño toda la marcha para mi desgracia.
Bueno, sigamos con la marcha .Tras cruzar la carretera que nos hubiera llevado a Fruniz, iniciamos un ascenso que no era especialmente duro. Para calentar piernas. Aquí comenzaron mis pequeños problemas. El cambio me saltaba una y otra vez y comencé a soltar juramentos a diestro y siniestro. En Arrieta hicimos nuestra primera parada para mirar mis cambios y sacarnos una foto en la cual descubrimos el aurea de santidad de Gaizka, la de santo ca….
Sin arreglar los cambios de mi bici, lo dimos por imposible, continuamos. Salimos del pueblo por una pequeña bajada y luego, una subida con un 10% de desnivel y con picos de un 13%. Lo que parecía una subida de 400 metros que pillamos con ganas acabo siendo una subida de 3km con esa media de desnivel. A pesar del esfuerzo, el lugar era precioso y lo disfrutamos. Tras la subida de esos 3km comenzamos la bajada de otro tanto. Una bajada limpia y rápida hasta Olabarri. Desde allí nos tomamos dirección Munguía.
Con el calorcito ya dando sus primeros toques, comenzamos a ver ciclistas que se cruzaban con nosotros. 2, 3, 40, 200. Madre mía, habíamos salido como champiñones. Para las 10:30 estábamos cruzando Munguia, y desde ahí nos dirigimos a Urduliz. Si en mi caso hace dos semanas estaba como un hacha, este Domingo me toco sufrir. Arrieta ya me había descolocado un poco, y llegando a Urduliz tuve que parar pues el isquitivial derecho me estaba molestando bastante. Tras unos estiramientos y un poco de réflex, continuamos, pero ya no iba a ser lo mismo. Comenzando la subida de Umbre, Igor apretó e incluso me puse a tirar un poco, pero poco tiempo duró. Donde estará esa subida a 26km/h de hace dos semanas. Fue entonces cuando decidí esperar a Gaizka, porque no podía, mientras que Igor y Txemi, (dile que venga Hostia), subían a todo trapo.
Llegamos a Umbe y paramos para retomar fuerzas, y para saludar a Anasagasti, que se paro en un coche para preguntarnos por una residencia. Por cierto, si os encontráis un día con alguien famoso que conozca todo el mundo y están Igor y Gaizka, no os preocupéis. Estos dos lo mandaran a tomar por culo, porque “solo” les sonaba la cara.
Tras el parón, bajamos hasta Asua y desde allí tiramos por el Txorierri hasta Larrabetxu, aunque a la mitad nos abandono Txemi, ya que vive en Derio. A mi me tocaba ver la raja del culo de Igor y de Gaizka. Chupando rueda llegamos a Erletxes y desde allí hasta Bilbo. Me llevaron y me mimaron para que llegara con un mínimo de Dignidad (gracias tíos), y cuando mire el cuanta km vi que Igor había hecho 96, Gaizka 98 y yo 100. Otra ruta y el maillot verde en manos de Igor y Gaizka. 4 de 4.
Hasta la semana que viene Lertxundis, aúpa TU!!!!
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